Salmos 11:5-7 "Los Salmos para mi vida"

Salmos 11. El fundamento de los Justos.

Salmo 11:5 "Jehová prueba al justo; Pero al malo y al que ama la violencia, su alma los aborrece."

Jehová prueba al justo: De Nuevo David contesta la pregunta, "Si fueren destruidos los fundamentos, ¿Qué ha de hacer el justo? David responde: el justo puede saber que el Señor le está probando, y ya que un Dios de amor le está probando sabrán que no serán enviados muy lejos u olvidados. El justo puede saber que el Señor está en control."

Pero al malo y al que ama la violencia, su alma los aborrece: De la forma que Dios ve, no es un observador indiferente. El tiene cuidado; ve a los malos y los aborrece. David está diciendo, "No necesito huir para protegerme, ya que Dios en los cielos esta mirándome y ve que tan pecaminoso es la conducta de mis enemigos."

Hebreos 10:31 dice "Horrenda cosa en caer en manos del Dios vivo" Este texto es para creyentes y no creyentes. En Esdras 7:9 dice "La buena mano de Dios estaba con Esdras", en este caso la mano de Dios estaba sobre Esdras para bien, Dios quiere poner su mano en nosotras para bien, pero a veces Dios pone su mano pesada sobre nosotras, nos hace vivir experiencias difíciles para volvernos a él si estamos en pecado. Pero la mano de Dios que nos disciplina como creyentes es totalmente diferente a la mano de Dios juzgando al hombre pecador. Dios va a juzgar el pecado y es algo que debemos predicar y enfatizar. El juicio, la ira de Dios está en el futuro de todo aquel que pisotee al hijo de Dios y tenga por inmundo la sangre del pacto en la cual fue santificado (Hebreos 10:29).

Salmo 11:6 "Sobre los malos hará llover calamidades; Fuego, azufre y viento abrasador será la porción del cáliz de ellos."

Sobre los malos hará llover calamidades; Fuego, azufre y viento abrasador: Dios castigará a los malos. Esto le da seguridad a David en medio del consejo de temer. Después de todo, si los impíos persiguen al justo, ¿cuánto más el Dios justo perseguirá a los impíos?

Fuego, azufre: Esto es el juicio final y eterno. ¿Qué debe temer David de los hombres destinados al infierno?

Será la porción del cáliz de ellos: El cáliz como un contenedor del juicio nos recuerda de la oración de Jesús en el jardín: "Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú" (Mateo 26:39). La copa que Jesús temía era la copa que contenía la ira de Dios en contra del pecado; una ira que merecemos, pero que Jesús bebió en nuestro lugar.

Salmo 37:28 "Porque el SEÑOR ama la justicia, y no abandona a sus santos; ellos son preservados para siempre, pero la descendencia de los impíos será exterminada."

Podemos estar seguras que tenemos un Dios Justo y Santo, que no abandona a los justos y que juzga el pecado y lo castiga. Y es precioso pensar que nuestro destino era el mismo que el de los impíos, pero gracias a que Cristo llevó la ira de Dios que nosotras merecíamos en la cruz del calvario, es cómo podemos tener comunión con Dios.

El día de hoy terminamos con nuestro estudio de salmos 11, de verdad querida hermana, deseo que haya sido de bendición para tu vida, que haya reafirmado tu fe y que cuando estés pasado por una prueba recuerdes estos pasajes, recuerdes que Dios está contigo y tiene control sobre todo, y que recuerdes está hermosa esperanza que tenemos como creyentes.

Salmo 11:7 "Porque Jehová es justo, y ama la justicia; El hombre recto mirará su rostro."

De la misma manera que Dios aborrece el pecado y quienes practican pecado, Él ama al justo y ama la justicia porque es su naturaleza. La recompensa de los rectos será estar en la presencia del Señor, ver su rostro. En tiempos difíciles, cuando los fundamentos son quitados, desde la tierra podemos mirar al cielo, porque los que son declarados justos por Dios le veremos cara a cara. Esto debe de ser nuestro ánimo y motivo de pasar la pruebas con gozo, sabiendo que las aflicciones del presente no son comparables con la gloria venidera (Romanos 8:18).

Nuestra vista debe estar en esta esperanza, para poder vivir una vida de confianza a nuestro Señor.

1 Corintios 9:25 "Todo aquel que lucha, de todo se abstiene; ellos, a la verdad, para recibir una corona corruptible, pero nosotros, una incorruptible."

Aquel atleta que se prepara, se alimenta sanamente y entrena a diario al fin reciben una corona corruptible, un premio que no permanecerá, pero nosotras debemos prepararnos, ejercitarnos en la piedad, alimentarnos de la palabra con la esperanza de recibir no una corono que no perdurará, si no una corona eterna, tenemos una esperanza eterna, de estar por toda la eternidad alabando a nuestro rey y Señor. Eso mi hermana, me da confianza en Dios, no importa qué situación esté viviendo en esta tierra, es pasajera y un día estaré gozando con mi Salvador.

Apocalipsis 21:4 "Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron."